tag:blogger.com,1999:blog-81655174094154801132024-02-08T10:44:05.241-08:00Economía y DesarrolloTomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.comBlogger270125tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-63741546117064103982016-12-20T05:08:00.007-08:002016-12-20T05:34:01.944-08:00Alvaro, estás equivocado<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
Con
sorpresa y enorme preocupación leo una nota en la página del Congreso de la
República anunciando que el diputado Alvaro Velásquez propone suprimir el
Ministerio de Desarrollo Social. Sin
conocer a fondo la iniciativa debo decir que me parece un enorme error, que
pesa doble viniendo de una corriente de pensamiento que intenta ser progresista
y presentar opciones frescas para el desarrollo del país. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Y como
las cosas hay que decirlas pronto y a la cara, cuando todavía se puede corregir
el rumbo, por eso es que tomo la pluma y públicamente emplazo a mi colega Alvaro
a que nos de sus razones para semejante propuesta de frenazo y retroceso en la
institucionalidad del país. Porque eso
es justamente lo que está proponiendo: diluir la agenda de protección social
hasta el punto de volver a hacerla invisible e irrelevante o, como era hasta
hace muy poco, dejarla en manos de obras de caridad de primeras damas de turno
o de la filantropía que buenamente quieran hacer fundaciones privadas y organizaciones
no gubernamentales. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Además,
me parece totalmente incongruente con la dramática realidad del país. Con “transversalizar” la protección social
mandando los diferentes programas a varias instituciones, como se pretende con
esta iniciativa, jamás vamos a revertir la tendencia en los niveles de pobreza
y desigualdad de Guatemala. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">No es
por allí que va la cosa, mi estimado Alvaro. Toda la región (¡y buena parte del
mundo!) van en dirección contraria a la que tu propones. Cerrar el MIDES esgrimiendo que estuvo
plagado de errores en su concepción es la salida fácil. Desmantelar y despedir es mucho más cómodo y
fiscalmente conveniente, porque dizque nos ahorrará algunos pocos quetzales en
el presupuesto nacional. Pero a la larga
no nos dejará mucho más que un poco de pirotecnia mediática y un enorme vacío
institucional que será dificilísimo volver a llenar. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">¡Con lo
que cuesta crear instituciones en Guatemala!, ¡con lo mucho que hubo que pelear
para finalmente ser el último país de Latinoamérica que tuviera un programa de
transferencias monetarias condicionadas!
Ni siquiera hablemos de otro tipo de intervenciones como escuelas
abiertas o comedores populares. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">No
debemos ni podemos darnos el lujo de volver a estar en el sótano mundial de la
política de protección social. Al
contrario, hay que capitalizar de lo que la experiencia internacional nos puede
enseñar. Sería una pena que la coyuntura,
una vez más, nos impida tener visión estratégica y de largo plazo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Alvaro,
no nos engañemos: a casi nadie le importan los pobres en Guatemala. Eso a pesar de que son la enorme mayoría. Lo sabes bien vos, lo sé yo, y lo sabe mucha
gente. Pero no muchos tenemos la
capacidad de incidencia que vos tienes en este momento. El cambio en las instituciones públicas no va
a suceder por arte de magia. Hay que
provocarlo. El Estado de Guatemala no es
progresivo en su naturaleza. Hay que pelear
mucho para crear espacios políticos, institucionales y fiscales para que
efectivamente lleguen recursos directa y exclusivamente a los pobres. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Desde
hace muchas décadas aprendimos que la coordinación interinstitucional es muy
difícil de alcanzar y muy frágil en su continuidad. No sucede ni siquiera cuando se buscan objetivos
mucho más rentables, mucho menos cuando estamos hablando de poblaciones
vulnerables, sin capacidad de agencia y movilización política. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Ojalá te
dieras el tiempo para dar una vuelta por la región y visitar instituciones como
el MIDIS en Perú, Prosperidad Social en Colombia, SEDESOL en México o el MIDES en
Chile. Entonces te darías cuenta que la
pobreza no se revierte con una colección de programas desperdigados e inconexos,
mal financiados, poco evaluados, y sin ninguna garantía de continuidad. Esa ruta es la que neciamente hemos
transitado por los últimos 60 años y los resultados están a la vista: la
pobreza en Guatemala aumenta. </span></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Ojalá
estés aún a tiempo de rectificar y proponer, en lugar de un cierre, una reforma
institucional seria, para que tengamos un MIDES eficiente, estable y
consolidado. Con mucho gusto me ofrezco
a facilitarte contactos para que conozcas estas y otras experiencias, y entonces
propongas una iniciativa de ley mucho más constructiva para el país. Ahí te dejo el reto. <o:p></o:p></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-15483750505567092016-01-11T13:19:00.001-08:002016-01-11T13:21:08.484-08:00¿Por qué apoyamos el diálogo político para el desarrollo rural? Aqui un pequeño <a href="https://www.youtube.com/watch?v=50Di94Y66Tc">video</a> que da unas ideas sobre el valor del diálogo político para impulsar políticas de desarrollo rural. Lo hemos hecho a través de grupos de diálogo rural (GDR), bajo el supuesto básico de que <a href="https://www.youtube.com/watch?v=EeqlkZYZ9xw">la mejor política se hace dialogando</a>.Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-74041615159250873212016-01-07T12:36:00.006-08:002016-01-07T12:36:47.849-08:00Pocas cosas, pero bien hechas<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i><span lang="ES-TRAD">“Es
evidente que el canal de transmisión que va desde la estabilidad macroeconómica
al bienestar de hogares e individuos está completamente bloqueado.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Termina
la primera semana del año. La normalidad
regresa poco a poco. Normalidad hasta
que llegue el siguiente sobresalto, que en este caso sucederá en una semana
más. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">El
gobierno de transición de Maldonado hará entrega al de Jimmy Morales. Estos días seguramente correrá bastante tinta
y chisme para especular, más por el morbo de saber quién llega a qué puesto que
por la necesidad de discutir a fondo las prioridades de la administración que
está por comenzar. A nosotros, los del
graderío nos corresponde tratar de ir un poquito en contravía. Porque a cierta distancia, aunque
desconozcamos detalles y minucias, se puede esbozar el bosque. O cuando menos un bosque. Eso es bueno para tener punto de
contraste. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Al
siguiente equipo de compatriotas a quienes tocará sentarse por unos meses en
despachos ministeriales les quedará decidir entre intentar hacer de todo y
frustrarse por lo abrumador de la tarea, o elegir dos o tres cosas y tratar de
hacerlas lo mejor posible. Personalmente
prefiero esto último, pocas cosas pero bien hechas. Eso sí, siempre que se tomen el tiempo
suficiente para elegir estratégicamente sus batallas, y que sean transparentes
con la población para contarnos hacia donde enfilarán sus cañones. Así de simple, estrategia para elegir y
transparencia para comunicar. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">A
partir de la coyuntura actual y de las necesidades más apremiantes de la
población, parece que hay dos objetivos estratégicos que harían mucho sentido
en el 2016: lucha frontal contra la pobreza y promoción del dinamismo económico
a nivel territorial. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Aunque
no hace falta justificar mucho su racionalidad, digamos que en el caso de
pobreza las últimas cifras revelada por el INE han hecho sonar suficientemente
las alarmas. Es evidente que el canal de
transmisión que va desde la estabilidad macroeconómica al bienestar de hogares
e individuos está completamente bloqueado.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Y en el
caso del dinamismo a nivel territorial también se puede decir otro tanto. Por una parte, los beneficios de años de
bonanza por la que atravesó la región no dieron mucha tracción a la economía
nacional. La llamada “década de América
Latina” pasó prácticamente desapercibida para los guatemaltecos. Y por la otra, esos amplios niveles de desigualdad
entre territorios son un llamado urgente a una política de inversión pública
que persiga una –¡y solo una!– cosa: cerrar brechas, de infraestructura, de
calidad educativa, de acceso a la salud, de impartición de justicia. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Pero en
términos concretos, ¿en qué se deben traducir estos dos objetivos estratégicos
para la administración Morales? <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">En cuanto
al combate a la pobreza, en la articulación de una agresivísima política
social, la cual necesariamente descansa en una institucionalidad con suficiente
músculo financiero, humano, y el mayor respaldo político del presidente. El ministerio de desarrollo social debe
constituirse en punta de lanza para este esfuerzo, emulando esfuerzos similares
que se han observado en países como Brasil, Perú, Chile y México.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">En relación
a la promoción del desarrollo territorial, la puerta natural de entrada está en
el sistema de consejos de desarrollo (a nivel territorial) y en un relanzamiento
del sistema nacional de inversión pública (a nivel central), de manera tal que
los recursos que se destinan a municipios sean efectivamente invertidos en obra
que cumpla con dos criterios: transparencia en la identificación de proyectos
de inversión, y búsqueda de la mayor rentabilidad social posible. Aquí el papel del Ministerio de Finanzas
Públicas y la SEGEPLAN son críticos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Si al
final de sus cuatro años la administración Morales nos hereda dos cosas
solamente: un país con al menos 20% menos de pobreza y un sistema de inversión
pública blindado de caciques locales, podremos decir que habrá hecho una
contribución sustantiva que la población sabrá reconocerle. </span> </div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-64593948265410616402015-12-15T14:20:00.001-08:002015-12-15T14:46:54.174-08:00¿Ideología tendenciosa?<div class="MsoNormal">
<i><span lang="ES-TRAD">Esta
mujer en sus propias palabras sintetiza la multidimensionalidad de la pobreza:
tierra, comida, alma, cuerpo y sufrimiento.
¿En dónde está lo tendencioso? ¿En dónde está la ideología?<o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Francamente
no lo creí cuando lo vi en mi buzón de correo electrónico. Pensé que quizás alguien estaría atizando el
fuego que ya comienza a arder en Guatemala alrededor del tema de pobreza a
partir de la última medición que hizo el INE y que da cuenta de un aumento del
número y porcentaje de pobres en el país.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Pero
no. Resulta que no. Me fui a su sitio de twitter y corroboré que
efectivamente era verdad. Juan Carlos
Zapata publicó lo siguiente: “Así es como se va generando una ideología
tendenciosa alrededor del concepto de pobreza”, e inmediatamente sigue una cita
del estudio que hizo el IDIES de la Universidad Rafael Landívar en los años
noventa sobre el fenómeno de la pobreza, la cual dice así “No tenemos tierra ni
comida suficiente para todos; estamos enferma del alma y del cuerpo por el
sufrimiento (Mujer Mam)”. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Me fui
entonces a buscar la definición de “tendencioso” al diccionario de la RAE, pues
quizás yo no estaba muy claro sobre el significado de la palabra. Y encontré este: tendencioso, que manifiesta
parcialidad, obedeciendo a ciertas tendencias, ideas, etc. No contento, busqué allí mismo la definición
de ideología y encontré lo siguiente: conjunto de ideas fundamentales que
caracteriza el pensamiento de una persona, colectividad o época, de un
movimiento cultural, religioso o político, etc.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Sigo
sin entender que nos quiso decir Zapata.
Porque al contrastar estas dos definiciones con la declaración de la
mujer de la etnia Mam que se cita en el estudio, pues no veo la conexión. Más bien me parece que es una declaración en palabras
muy sencillas –de hecho lo hace en un español imperfecto– para describir una situación
de profunda carencia. Y si usted lo lee
con un poco de más cuidado, se dará cuenta que esa mujer recoge lo que muchos
años más tarde se volvió uno de los conceptos más revolucionarios en el mundo
del desarrollo: que la pobreza no se reduce solamente a una dimensión material
(dinero, tierra, activos), sino que además representa todo un estado de ánimo,
un nivel de autoestima, un conjunto de dimensiones subjetivas del bienestar.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Esta mujer
en sus propias palabras sintetiza la multidimensionalidad de la pobreza:
tierra, comida, alma, cuerpo y sufrimiento.
¿En dónde está lo tendencioso? ¿En dónde está la ideología? ¿En el hecho
que el INE utilice la cita para abrir una discusión sobre el concepto de
pobreza? ¡Por favor! Cuando estamos hablando de casi el sesenta por ciento de
la población, hablar de pobreza es hablar de realidad nacional. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">No me
imagino tampoco que esté cuestionando el enfoque metodológico del estudio, ni los
hallazgos que en su momento fueron novedad en un país que niega
sistemáticamente su realidad. De hecho, muy
pocos años después se generalizó esta forma de mirar el fenómeno, tanto así que
tuvimos a la vista publicaciones de talla mundial como “Voices of the poor” y
otras por el estilo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Desde
donde yo me siento, y desde la experiencia profesional que he tenido,
francamente no veo la ideología tendenciosa.
Pero eso no quiere decir que yo esté en lo correcto. Justamente por eso hago la pregunta de manera
pública. Porque más me parece que, si
acaso, está en la cargada frase de Zapata.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Lo
bueno de todo esto es que, aunque quizás podamos tener profundas diferencias sobre
la forma de entender y procurar el desarrollo en Guatemala, al menos hoy podemos
decirlo abiertamente y buscar el debate.
Eso, aunque modesto, aunque no lo parezca mucho, es un paso adelante. Ahora toca ver hasta dónde llega la capacidad
de influencia de un relato versus otro. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES"><a href="mailto:trosada@gmail.com"><span lang="ES-TRAD">trosada@gmail.com</span></a></span><span lang="ES-TRAD"> <o:p></o:p></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-89544017899199394852015-09-24T00:28:00.002-07:002015-09-24T00:28:20.667-07:00La caja negra rural donde resuenan las promesas de campaña<span style="background-color: white; font-family: 'Droid Sans'; font-size: 15.4px; line-height: 19.6px;"><a href="https://nomada.gt/la-caja-negra-rural-donde-resuenan-las-promesas-de-campana/">Aquí</a> mis cinco len publicados en Nómada el 22 de septiembre.</span>Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-43637900624313380082015-08-18T15:25:00.001-07:002015-08-18T15:25:07.863-07:00Vivimos en un país desigual y aquí no pasa nada<span style="background-color: white; font-family: 'Droid Sans'; font-size: 15.4000005722046px; line-height: 19.5999984741211px;"><a href="https://nomada.gt/vivimos-en-un-pais-desigual-y-aqui-no-pasa-nada/">Aquí</a> mis cinco len publicados en Nómada el 18 de agosto.</span>Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-62029864911035166312015-08-04T02:49:00.002-07:002015-08-04T02:54:04.973-07:00Por 15 años, esta es una agenda que podría seguir Guatemala<a href="https://nomada.gt/por-15-anos-esta-es-una-agenda-que-podria-seguir-guatemala-2/">Aquí</a> mis cinco len publicados en Nómada el 30 de julio.<br />
<br />Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-28762636696319805482015-07-09T04:35:00.001-07:002015-07-09T04:55:22.998-07:00Ignorance is bliss<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD">“(…) además de la
lucha frontal contra la corrupción y la reforma política, ¿tendrá la sociedad
civil que echarse a cuestas el análisis, discusión y propuestas sobre todos y
cada uno de estos grandes temas nacionales?.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Ignorance
is bliss, dicen los sajones para referirse a que a veces es mejor ignorar
ciertas cosas</span><span lang="ES">. A
veces, en el corto plazo, o en determinada coyuntura, y solo por cortísimo
tiempo, pueda que de una falsa sensación de bienestar. Pero al final siempre es mejor conocer el
terreno donde se está parado. Lo mismo
para personas que para sociedades. Y en materia
de desarrollo socioeconómico, donde el negocio está en transformar la realidad,
ciertamente es mejor procurar conocer la naturaleza precisa de los desafíos,
pues solamente así es que surgen ideas que ayudan a salir del atraso de forma
sostenible. Lo demás es demagogia. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES">Durante los últimos meses nos hemos consumido
en una crisis política profunda, que ha colocado como primera y más importante
prioridad en la agenda nacional una reforma del sistema político. Unos apoyan y otros arrastran los pies, pero
todos lo reconocen. Sobre eso se dice y
escribe mucho y a diario. Nada de malo
en ello, así debe ser. Es hoy que la
ventana de oportunidad está abierta y por lo tanto se debe aprovechar al
máximo. Los que creemos en el cambio de
fondo mantenemos la presión, conscientes de que esto va para largo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES">Pero no hay que olvidar que el diálogo social
debe seguir siendo mucho más complejo, diverso, polifacético. Tenemos que estar conscientes que aun y
cuando los ciudadanos lográsemos todos los cambios que estamos exigiendo, aun
así habremos pagado un costo. Gracias a
este disfuncional sistema político, se nos ha ido otra oportunidad de
aprovechar un evento electoral que nos permita revisitar las prioridades de
desarrollo de Guatemala y la agenda de política pública que es consistente con tales
prioridades. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES">Nadie o muy pocos están debatiendo hoy sobre
el esfuerzo fiscal que debemos hacer para mejorar la calidad en la educación,
aumentar la cobertura en salud, o establecer un sistema de protección social
que vaya más allá de programas de transferencias condicionadas en efectivo; de las
inversiones en infraestructura qué se necesitan para elevar la competitividad
de nuestro aparato productivo y de los mecanismos para financiar tales
proyectos; de la política de promoción de empleo para jóvenes; de la
estrategias que debemos seguir para promover un mayor desarrollo territorial; o
de la manera en que queremos seguir insertándonos en los mercados
internacionales. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES">Todos esos temas están parqueados, en estado
vegetativo, hibernando. No por falta de
capacidad en la sociedad civil, sino porque las energías están enfocadas en la
urgencia de rescatar lo poco que va quedando de nuestras instituciones públicas. Estamos casi como salvando los muebles y nada
más. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES">Me pregunto entonces si además de la lucha
frontal contra la corrupción y la reforma política, ¿tendrá la sociedad civil
que echarse también a cuestas el análisis, discusión y propuestas sobre todos
estos temas nacionales? Porque ¡ojo!, que si los dejamos así, huérfanos y a la
deriva, no nos sorprendamos luego que por los siguientes años nuestros
indicadores de pobreza, desigualdad, empleo, productividad, y desarrollo humano
se estanquen o retrocedan, como de hecho ya está sucediendo con varios de
ellos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">El
problema es que, como bien escribió hace un par de días Arturo Pérez-Reverte refiriéndose
a la coyuntura de su país, “(…) aquí las voces lúcidas se silencian o se
desprecian, relegadas por un grosero rifirrafe de consignas políticas,
descalificaciones e insultos.” Y así la
salida del atraso se hace más lenta y cuesta arriba. </span>Ignorance
is bliss, yes…, but not all the time! </div>
</div>
</div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-51927564034490360702015-07-01T23:35:00.001-07:002015-07-02T00:54:17.372-07:00Hasta aquí<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD">“(…) intentar
comunicarme con un público no especializado, tratando de decodificar ideas y
conceptos que muchas veces no logran bajar del Olimpo de las tecnocracias.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Hace
ocho años estaba haciendo antesala en el ministerio de agricultura cuando sonó mi
teléfono. Era Maricela Herrera para
preguntarme si tendría interés en ser parte de los columnistas de la sección
económica de Prensa Libre. La idea me atrajo mucho así que no tuve que pensarlo
demasiado. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Fue almorzando
con mi padre en el restaurant Altuna que le encontré un nombre al espacio:
Economía y Desarrollo. Porque eso era
justamente lo que quería comunicar en mis artículos: que la Economía como
disciplina sólo tiene sentido en la medida que logra conectar con ese anhelo
natural que todos los seres humanos tenemos de mejorar nuestra condición de
vida, es decir, desarrollarnos individual y colectivamente. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Así fue
como zarpé con uno de los temas que más me apasiona: política social. Una, dos, tres columnas. Y muy rápidamente comencé a recorrer otros senderos
cercanos. Pobreza, desigualdad, empleo, micro
finanzas, desarrollo rural, instituciones, política pública, en fin. Son tantas las áreas del desarrollo sobre las
que se puede escribir, que afortunadamente temas nunca hicieron falta. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Siempre
fue un aporte que di sin retribución económica alguna. Eso sí, procuré cumplir semana a semana. Y fueron contadas las veces que caí en falta,
muchas de ellas por estar en alguna región remota de este continente, donde la
conectividad es muy precaria o inexistente. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tengo
muchas anécdotas que he ido recogiendo en el camino. Como aquella columna que tuve que escribir en
el teclado de mi BlackBerry porque no tenía computador en la aldea donde estaba
trabajando. O aquel otro mensaje que me
escribió un maestro desde una escuela rural en Huehuetenango para agradecerme
por el material que le ayudaba a preparar sus clases para muchachos de
secundaria. O aquella otra columna que
escribí durante una misión a Haití, con un nudo en la garganta, pues es una de
las experiencias más fuertes que he tenido en mi vida profesional. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Desde
el principio me propuse cuatro objetivos.
Primero, intentar comunicarme con un público no especializado, tratando
de decodificar ideas y conceptos que muchas veces no logran bajar del Olimpo de
las tecnocracias. Segundo, democratizar
literatura a la cual las grandes mayorías tienen poquísimo acceso. Convertir información privilegiada en
conocimiento público. Tercero, dar
prioridad a temas estructurales que explican nuestro atraso. Esos de los que se habla poco porque
generalmente se los traga la coyuntura.
Y cuarto, mantener disciplinadamente el espacio todos estos años,
viviera donde viviera, porque así me mantenía vivo y vinculado con mi
país. Mi país, esa noción-territorio que
tanto me ha dado y por el cual mi familia ha trabajado por generaciones para
tratar de hacerlo un espacio cada vez más vivible. Todos estos objetivos, dicho sea de paso,
siguen siendo válidos para mí, por lo que dejaré que sigan orientando mi acción
profesional. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Pero
todo tiene un ciclo y hoy me toca poner un hasta aquí. Economía y Desarrollo en Prensa Libre llega a
su fin. Lo digo con una mezcla de nostalgia
y satisfacción por la labor cumplida. Toda
esta tinta, tiempo y reflexión me han enseñado mucho. Y esto no hubiera sido posible sin una
audiencia con quien intercambiar. Por
eso permítame darle las gracias a usted, que me leyó una o varias veces, que
compartió o no mi opinión. Debo decirle
que fue su lectura crítica mi mayor motivación siempre. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Así, con
la misma frase de aquella primera columna en julio de 2007 termino hoy esta “</span><span lang="ES">travesía editorial agradeciendo a Prensa Libre por el ofrecimiento de
un espacio en sus páginas para discutir temas económicos y del
desarrollo”. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES">Por ahora seguiré publicando semanalmente en
mi blog <a href="http://ekonomiaydesarrollo.blogspot.com/">http://ekonomiaydesarrollo.blogspot.com/</a>. Luego veremos a dónde más me llevo mis cinco
len. </span><span lang="ES-TRAD"> </span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-5873469593363535252015-06-25T00:46:00.003-07:002015-06-25T00:46:41.581-07:00¡Institucionalidad!, ¿cuál?<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD">“Dos ideas muy
poderosas en la Guatemala de hoy: ciudadanía con capacidad de derrocar a sus
elites y redistribución del poder político, ambas precondiciones de prosperidad
económica.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Las
instituciones son elemento central de cualquier proceso de desarrollo. Más importante que la dotación misma de
recursos naturales o del nivel de desarrollo tecnológico de un país. De hecho, hay una muy amplia literatura que
se ha ocupado del tema, recordándonos que conceptos como crecimiento económico,
progreso social, democracia, participación ciudadana, son todas cosas muy
deseables, pero difícilmente alcanzables sin eso que llamamos “instituciones”. Que no son más que el ordenamiento que nos
permite vivir en convivencia, que establece jerarquías y roles particulares
para cada individuo en una sociedad. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">¡Espéreme
un momento! Ordenamiento, convivencia,
jerarquías, y roles. Cuatro palabras
clave que ciertamente capturan la esencia de lo que es una institución, pero
que no nos dice nada respecto de sus fines y, por lo tanto, tampoco nos permite
saber si son deseables o indeseables. Así, familia, iglesia y mafia son todos
ejemplos de instituciones, claramente unas más deseables que otras. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">En una columna
de opinión anterior hice referencia a un análisis reciente hecho por Acemoglu y
Robinson, en donde dan su explicación del éxito o fracaso de las naciones
diciendo que (sic) “los países que hoy son ricos lograron esa prosperidad porque
sus ciudadanos derrocaron a las elites que controlaban el poder y crearon una
sociedad en donde los derechos políticos estaban mucho más ampliamente
distribuidos.” <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">También
decía sobre el argumento central de los autores que (sic) “son las instituciones
–políticas primero, y económicas después– las que explican el desempeño de las
naciones. Poderoso planteamiento ese de
llevarnos de lo político a lo económico.
De cómo las instituciones políticas, que son las llamadas a distribuir
el poder, generan los incentivos para que surjan instituciones económicas que
favorezcan o inhiban iniciativa, innovación, visión de largo plazo, y con ello
crecimiento económico y bienestar social.”
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Dos
ideas muy poderosas en la Guatemala de hoy: ciudadanía con capacidad de
derrocar a sus elites y redistribución del poder político, ambas precondiciones
de prosperidad económica. Argumentos que
van en contravía de esa perorata que se tienen algunos funcionarios públicos y
analistas cuando salen a defender esa mal entendida e insostenible “institucionalidad”
que ya no nos gobierna. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">La
evidencia es amplia también en señalar que no son muchas las ventanas de
oportunidad que da la historia para producir verdaderos quiebres, puntos de
inflexión, que permitan a un país cambiar su trayectoria de desarrollo. De una que refuerza instituciones extractivas
y capturadas por unos pocos, hacia otra que favorezca una distribución más
democrática del poder político y las consecuentes oportunidades económicas. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tales
momentos son la excepción más que la regla.
No llegan ni siquiera en cada generación. Y de eso los guatemaltecos sí que podemos
hablar con propiedad, pues desde 1944 no se había vuelto a mencionar una
primavera política, evocando aquel despertar ciudadano que fue capaz de
construir un nuevo imaginario e institucionalidad básica que puso a la
Guatemala de aquel entonces a la vanguardia de muchos procesos de desarrollo en
la región. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Desafortunadamente
en aquellos años esa nueva institucionalidad nacional contravino los intereses
de otra institucionalidad más poderosa, y la experiencia completa debió
abortarse. Nos ha tomado 70 años volver
a sentir en la piel esa oportunidad de cambio pacífico y democrático, que quiebre
con nuestra historia. Y todo apunta a
que a pesar de la defensa oficiosa de una institucionalidad desahuciada, ¡avanzamos! </span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-61610449830586598042015-06-18T00:25:00.001-07:002015-06-18T00:25:22.611-07:00Elegir ¿qué?<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD">“La población
urbana, por su parte, arde y se consume en su catarsis, pero sin terminar de
coronar una posibilidad de reforma real.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Elegir
sin saber qué está eligiendo. Es lo peor
que le puede pasar a cualquiera. Así lo
dice la psicología, la sociología, la economía, y prácticamente cualquier
ciencia social. Las consecuencias de una
elección a ciegas, apresurada, peor aún, con información incompleta o falsa o
guiados solamente por un impulso, generalmente conducen a la frustración y al
error. Por eso personas, hogares,
empresas, todo mundo, invierten una gran parte de energía y recursos justamente
en eso: obtener la mejor información posible para poder así tomar la mejor
decisión posible. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Eso que
aplica en el plano individual es igual en el plano colectivo. El ejemplo clásico en democracia es un proceso
electoral, en donde la mayoría adulta de una sociedad debe expresarse y elegir
entre grupos de ciudadanos que se presentan y ofrecen como los más idóneos
administradores de lo público, del bien común.
(Esto es el libro de texto). <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Es
justamente allí, en una elección sin saber lo que se está eligiendo que deriva
toda la frustración acumulada de sociedades como la guatemalteca que, una y
otra vez se topan con que no cuentan con los elementos suficientes para poder desarrollar
y después elegir sus liderazgos políticos.
Y vamos teniendo que validar, ratificar, legitimar con una pálida
papeleta y una cruz una decisión que nos afectará cuatro años –aunque en
realidad son muchos más, porque la política pública (mala y buena) tiene
inercia y se extiende, a veces indefinidamente–.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">En el
momento por el que pasa Guatemala, con el ambiente social y político tan pero
tan volátil y enrarecido (coyuntura), y con los niveles de desigualdad y
debilidad institucional tan altos (estructura), esta incertidumbre se
acentúa. Se magnifica. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">La
población rural, en promedio menos crítica y con un ancestral escaso acceso al
poder central, se conforma con dinámicas locales, en donde lo concreto, lo
inmediato, es suficiente para convivir con un sistema político y económico que como
en el fondo nunca le ha dado nada, pues con espejitos y baratijas –que en el
siglo XXI son almuerzos gratis, camisetas, láminas y rifas de electrodomésticos–
basta. Así que difícilmente por ahí
vendrá la fuerza transformadora en la actual crisis.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">La
población urbana, por su parte, arde y se consume en su catarsis, pero sin terminar
de coronar una posibilidad de reforma real.
Estamos como cuando hacíamos competencias de pulsos en la escuela, por
ratos inclinamos el brazo en una dirección y por ratos en otra. Mientras tanto, nuestro oponente gana tiempo
y apuesta al cansancio, eso sí con una sonrisa cínica que nos repite y recuerda
el nivel de descaro que ha desarrollado amplia e impunemente. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Así,
los problemas de siempre, esos históricos frenos a nuestro desarrollo, siguen
allí, fermentándose: bajo empleo formal, baja productividad de los factores de
producción, baja carga tributaria, desnutrición crónica, déficit de
infraestructura pública –caminos, agua, luz, internet, médicos, policías,
maestros, trabajadores sociales–, deterioro de nuestra base de recursos
naturales, expulsión de nuestra mano de obra –calificada o no–, inseguridad
ciudadana, narcotráfico y crimen organizado.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">La
tensión entre esta coyuntura y aquella estructura no termina de
sintetizar. ¿Puede un país vivir así
indefinidamente? ¿Puede este país soportar otros cuatro años sin contenido en
sus tomadores de decisión? ¿Por qué nos está costando tanto organizarnos, cerrar
el negocio, somatar de una buena vez la mesa, y comenzar a reconstruirnos?</span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-31423570313009350592015-06-10T23:17:00.000-07:002015-06-10T23:44:49.984-07:00Informales, ilegales e inestables<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span lang="ES-TRAD">“Es fundamental
entonces poder hacer los amarres entre reformas al sistema político que la
sociedad está demandando y transformaciones económicas estructurales que se necesitan
en el país.” <o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">“El
crimen organizado [y el narcotráfico] es muy probablemente el mayor empleador
del país.” Esas fueron las palabras del
arzobispo metropolitano Oscar Vian que aparecieron publicadas en prensa hace un
par de días. Sus razones tendría para
decir algo así, y aunque no dio una cifra específica, a juzgar por lo que está
sucediendo actualmente en el país, probablemente no está muy lejos de la
realidad. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">La
corrupción y el crimen organizado hasta hace unas semanas no eran más que la
conversación cajonera de pasillo, de reunión social, de sobremesa
familiar. Pero no salía ni pasaba de
allí, porque era muy peligroso convertirse en el o la valiente que alzara la
voz y señalara con el índice a persona alguna –menos aún a un funcionario
público–. Era nuestro enorme y patético
elefante en el cuarto. Tumor canceroso
que lentamente nos devoraba. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Pero
hoy eso ha cambiado. El dique mental que
nos cohibía y amedrentaba, finalmente cedió.
La sociedad despertó y reaccionó como no lo hacía desde hace por lo
menos tres generaciones. Tanto así, que
ya no saben qué hacer con nosotros. Somos
el pulpo que se salió de la botella y ahora no hay santo poder que lo meta de
vuelta. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">En ese
despertar, en ese caldo de cultivo, es que caen las declaraciones del arzobispo. Que dicho sea de paso son absolutamente
consistentes con las estadísticas nacionales que nos dicen a gritos que un 70%
de la población ocupada está en el sector informal, que tenemos a más un millón
de paisanos que han tenido que dejar el país para salir en busca de mejores
oportunidades económicas, y que aún somos una población muy rural y muy joven. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Todo
eso junto nos pone contra la pared, ante una realidad muy cruda y muy grave. Debajo de la actual crisis corren problemas
de difícil pero de urgente corrección, en donde probablemente uno de los más importantes
y urgentes sea la generación de oportunidades de empleo para todos esos
muchachos y muchachas que hoy se topan con callejones oscuros, sucios y sin
salida. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Es
fundamental entonces poder hacer los amarres entre reformas al sistema político
que la sociedad está demandando y transformaciones económicas estructurales que
se necesitan en el país. Al final del
día, devolverle un poco de decencia a la actividad política y el saneamiento de
las instituciones públicas no es un fin en sí mismo, sino una condición necesaria
pero no suficiente para poder mejorar las condiciones de vida de todos
nosotros. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">En la
coyuntura actual nuestro principal activo han sido los jóvenes, algunos de
ellos con más y otros con menos oportunidades.
Algunos de barrio, otros de colonia, otros de aldea, da igual. Aun así, en medio de tanta desigualdad, hemos
logrado conectar unas Guatemalas con otras y nos hemos hecho sentir y escuchar. Imagínese entonces qué pasaría si de esta
crisis lográramos salir bien librados y le cambiamos la trayectoria al
país. Si logramos ampliar los espacios
de participación política e inserción económica de nuestra juventud, de manera
tal que el destino de la mayoría de estos muchachos ya no sea la informalidad,
la migración, el crimen organizado o el narcotráfico. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">He allí
la importancia de no perder de vista el horizonte. Ese mismo que, como bien dijera Eduardo
Galeano, sirve para hacernos avanzar, movernos en dirección de un estadio mejor,
de una Guatemala distinta que nos sepa arropar a todos. </span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-73589995661036639122015-06-03T23:50:00.000-07:002015-06-03T23:50:06.248-07:00De corrupción y descaro al cauce y desfogue<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD">“Pero el
sentimiento colectivo aumenta, se contagia, y ya se sugieren acciones para
elevar el tono, contenido y forma de la protesta –el paro nacional, por ejemplo–.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">La
corrupción y el descaro han sido los grandes pegamentos de esta crisis. Es a la sombra de estas dos bofetadas que nos
ha dado el gobierno de turno y la clase política que los ciudadanos decidimos
movilizarnos poniendo a disposición todo lo que teníamos a nuestro alcance:
redes de contactos, palabra escrita, presencia física, nacionalismo, y un
profundo deseo de cambio motorizado por nuestro mayor y mejor activo: la
juventud. Esos fueron los ingredientes
de la primera marcha en abril y han seguido siendo los mismos ingredientes de
las subsiguientes. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Por
ratos hemos contado con el apoyo de otros factores de poder tradicional como el
sector privado organizado y la Embajada de los Estados Unidos. Y como bien apuntó un colega columnista, fue
en la alineación perfecta de estos tres grandes astros (ciudadanía como principal
actor y factor detonante, CACIF, y gobierno de los Estados Unidos) que se logró
asestar el golpe de efecto más grande a la fecha, con la renuncia y salida por
la puerta trasera de la señora Roxana Baldetti. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Por
ratos también hemos recibido golpes a los guantes de parte de grupitos (¡esos
sí grupitos!) que han querido distorsionar las cosas y ver micos aparejados en
la energía social que se ha desatado, intentando mermar nuestro entusiasmo con
viejas consignas de épocas ya superadas.
Han dicho que todo esto ha sido orquestado por cubanos y venezolanos,
intentando apelar a sentimientos de anticomunismo y guerra fría. Han dicho también que las movilizaciones
campesinas han sido financiadas y organizadas por países europeos, tirando aquí
pedrada triple: 1) intentando inflamar una soberanía nacional mal entendida; 2)
menospreciando a las organizaciones de base y su capacidad de expresar su descontento
y repudio al gobierno; y 3) subvalorando la reacción de la juventud urbana
metropolitana que inmediatamente cerro filas con el movimiento indígena y
campesino, muestra clara de que esto no tiene absolutamente nada que ver con
ideologías sino con un objetivo que nos interesa a todos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Además,
también hemos resistido cambios de marea.
Los factores tradicionales de poder no tienen certeza de querer apoyar
un cambio radical y más bien parecieran darse por satisfechos con la elección
del nuevo vicepresidente y la detención de funcionarios implicados en actos de
corrupción (IGSS y SAT). Y como quien no
quiere la cosa, optan de manera implícita por una salida negociada y dentro de
las reglas actuales del juego. Es decir,
manteniendo el cronograma electoral y aceptando que el señor Pérez Molina siga
en el cargo hasta enero de 2016. No hay
que perder de vista que esta estrategia de salida tiene como aliados naturales a
los partidos políticos que ya llevan varios años invirtiendo tiempo y dinero para
hacerse del poder. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Lo interesante
es que a pesar de todo la presión social no ha disminuido. Y cuando digo “todo” quiero decir a que los
ciudadanos indignados estamos plenamente conscientes de todos estos movimientos
estratégicos y toma de posición de parte de tales actores políticos
tradicionales. Pero el sentimiento
colectivo aumenta, se contagia, y ya se sugieren acciones para elevar el tono,
contenido y forma de la protesta –el paro nacional, por ejemplo–. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Para
bien o para mal el tiempo sigue corriendo y con ello se acerca el momento de
definiciones. Definiciones en términos
de agendas de reformas, pero también en la toma de posición de parte de la
ciudadanía con relación al próximo evento electoral y la convocatoria a una
asamblea nacional constituyente. La
corrupción y el descaro, que han sido los grandes pegamentos de esta crisis,
deberán encontrar pronto cauce y desfogue con capacidad real de transformación. Hay decisiones fundamentales frente a
nosotros, que no se podrán posponer por mucho tiempo a riesgo de descarrillar
un proceso que hasta hoy lleva muy buen ritmo.
Esta primera fase está casi agotada.
</span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-57358791236657174042015-05-28T04:32:00.004-07:002015-05-28T04:32:24.447-07:00Los costos de este cambio de piel<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD">“(…) en su lógica
y algoritmo seguimos “business as usual” y las jornadas de abril y mayo no tendrán
mayor impacto en la economía nacional.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Como
era de esperarse, con el correr de los días comienzan a aparecer especulaciones
sobre impactos económicos que tendrá la actual crisis política. Los primeros en salir al aire fueron
analistas de inversión privados que, muy a su conveniencia, llaman a la cautela,
a recuperar cuanto antes la calma, a dejar que el gobierno termine su período,
todo en nombre del sacrosanto clima de negocios y la calificación riesgo
país. No es de extrañar esta posición,
viniendo de opiniones que representan y se benefician de la estabilidad como condición
para la rentabilidad del capital sobre cualquier otra cosa. Son visiones ciegas y desinteresadas del bien
común, y por tanto no recogen dentro de su lectura las evidentes necesidades de
transformación y reforma que urgen al sistema político nacional. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Más
recientemente apareció la voz gubernamental.
Primero en boca del señor Pérez Molina, alertando sobre una caída en la
recaudación, producto de la no vigencia del impuesto a la telefonía. Curiosamente sin hacer vinculación alguna con
la crisis que detonó el descubrimiento de la red de defraudación fiscal de “La
Línea” y la estafa-crimen del IGSS, y los efectos que ambos escándalos puedan
tener en la moral tributaria. (Aunque a
decir verdad, en las condiciones actuales quizás sea mucho más moral en este
momento apoyar reformas a la SAT y a ciertas piezas de legislación, en vez de
seguir llenando el agujereado barril de las finanzas públicas que sólo ha servido
para engordar inmoralmente las cuentas de banco de varios empresarios y
funcionarios públicos asociados a estos.) <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Finalmente,
hace tan sólo un par de días nos enteramos que –¡después de noventa días sin
reunirse!– el gabinete económico tímidamente opina sobre la crisis y cómo esta
podría reflejarse en indicadores macroeconómicos de corto plazo. No nos dicen nada muy iluminador, por cierto. Más bien, lo que sí resulta increíble es que
los análisis de dicho gabinete sigan proyectando tasas de crecimiento económico
en el rango del 3.6% al 4.2%, como si nada estuviera pasando. O sea que en su lógica y algoritmo seguimos
“business as usual” y las jornadas de abril y mayo en la plaza central,
cabeceras departamentales y frente a embajadas de Guatemala alrededor del mundo,
no tendrán mayor impacto en la economía nacional. Qué raro, ¿no?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Eso
solo se puede explicar de dos formas: porque, o hay una lectura deliberadamente
politizada de la coyuntura económica, postrer esfuerzo del gabinete por tratar
de minimizar la situación crítica por la que atraviesa este decadente gobierno;
o bien nuestra estructura económica se ha sofisticado a tal punto que ha
logrado prescindir de la política para su funcionamiento, lo cual sería
gravísimo y solamente reforzaría la necesidad de acometer reformas de fondo que
nos permitan volver a reconectar ambos mundos –política y economía–, como normalmente
sucede en cualquier sociedad del mundo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Especulaciones
aparte, lo que todos los ciudadanos indignados tenemos que tener claro es que
esta crisis y las reformas que vamos a acometer para transformar a fondo el
sistema político tendrán consecuencias económicas que, en el escenario más
benigno, se traducirán en cautela de parte de inversionistas y en una posible
contracción de la inversión pública y del crecimiento. Y lo que la elite política tiene que tener
claro es que los ciudadanos estamos conscientes y dispuestos a pagar los costos
de este cambio de piel, porque sabemos que los beneficios son mucho mayores y
que el statu quo dejó de ser una opción desde el 25 de abril. </span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-51737800456880611112015-05-21T04:44:00.003-07:002015-05-21T04:50:10.165-07:00La trenza del cambio<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD">“El entusiasmo ha
crecido y quizás hasta nos han comenzado a dar ganas de pensarnos cada vez más
como un enorme colectivo, orgánico, organizado.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Nadie
sabe con exactitud a dónde iremos a parar con esta crisis política. Estamos en una auténtica puja, en donde los
diferentes actores tradicionales intentan jugar su papel, pero se han topado
con la emergencia de un fenómeno social que no veíamos en Guatemala desde hace
décadas. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">La
mezcla de espontaneidad con hartazgo y juventud, han logrado darnos a todos una
sacudida tal que nos permite incluso pensar en soluciones hasta hace unas pocas
semanas inimaginables. Como cuando aquel
niño aprende a caminar, da el primer paso, se da un sentón pero cae lejos de la
pared que le daba el equilibrio. Y poco
a poco se va dando cuenta que se puede poner de pie, tambaleándose, erguirse, y
dar otro par de pasos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Así nos
está sucediendo. Estamos experimentando
cosas nuevas. Experiencias inéditas en
nuestro imaginario. Sensaciones y
emociones que estoy convencido marcarán a toda una generación, porque le habrán
dado un referente nuevo, rejuvenecido, sobre el cual poder seguir construyendo
un país con rostro más humano y amable.
La Guatemala distinta que sigue siendo posible.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Las
marchas masivas y crecientes que están teniendo lugar son quizás la expresión
más concreta, es cierto. Aunque ya no son
el único ejemplo. La plaza se ha
convertido en el verdadero espacio público, donde nos hemos dado cita todos los
guatemaltecos, independientemente del piso que habitemos en el edificio de
cinco niveles que un día dibujó con tanta maestría Don Edelberto Torres. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">A
fuerza de empellones a puertas y ventanas, de romper tabiques y muros falsos,
hemos salido al aire libre a conectar y reconocernos. Primero solamente a darnos cita en un día y
hora específicos. Vernos la cara, corear
juntos, cantar un himno, quizás sonreírnos, darnos la vuelta y volver a nuestra
esquinita. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Pero
como contagiados por la enorme energía y positivismo que se multiplica cuando
se logra construir un objetivo que todos perseguimos, cuando verdaderamente nos
sentimos parte de algo, nos hemos quedado con ganas de repetir esa experiencia
y ponernos a prueba una y otra vez. Y
para sorpresa nuestra, la energía social sigue allí. El entusiasmo ha crecido y quizás hasta nos
han comenzado a dar ganas de pensarnos cada vez más como un enorme colectivo,
orgánico, organizado, y cada vez menos como simple colección de individuos que
por esas casualidad y curiosidades de la historia logran compartir por un instante
efímero. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Las
ganas de seguir alimentando “esto”, esto que se siente tan bien, esto que por
primera vez nos muestra nuestro rostro en plural y construye ese inmenso
mosaico de voces, colores, edades, y estaturas, esas ganas siguen allí. Que no nos extrañe en un país de jóvenes que
hayan sido los mismos jóvenes quienes hayan dado el paso al frente, y hayan
dibujado un hermoso collage que no se nos va a olvidar jamás y que seguramente
vamos a evocar y repetir de ahora en adelante.
Cuando recordemos que fue en estas jornadas de mayo que la juventud
universitaria de todas las casas se volvió a trenzar en una sola, y desfilar
juntos hacia un objetivo común, movidos por un deseo de cambio igualmente común. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Es el
enorme poder que tiene la cohesión social.
Esa que tanta falta nos estaba haciendo y que, como bien hemos
experimentado estos días, tanto fuerza tiene y libera, y tanto bien nos está trayendo. Allí y en ninguna otra parte radica la posibilidad
del cambio. ¡Adelante Guatemala, esto
apenas comienza!<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-86234636362125936302015-05-14T03:30:00.005-07:002015-05-14T03:30:51.198-07:00Un cóctel para esta crisis<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<i style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD">“(…) la protesta
gradualmente comienza a combinarse con propuesta y con mucha auditoría social.”</span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">La crisis
no ha concluido. Al contrario,
evoluciona y avanza. Se alcanzó el punto
en que la vicepresidenta debió retirarse del cargo con mucha pena y nada de
gloria. Eso en sí mismo es un importantísimo
logro para nuestra democracia, pero a la vez es un hecho insuficiente para
atender las demandas sociales y salir del bache. La presión social no va a menguar, más bien seguirá
in crescendo hasta que se llegue a reformas sustantivas. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Ahora la
protesta gradualmente comienza a combinarse con propuesta y con mucha auditoría
social. Así debe ser y así debe
continuar. La estrategia de hacer las
concesiones políticas mínimas necesarias para mantener a flote esta decadente administración
hasta enero de 2016 –o cuando menos hasta septiembre de 2015– no aplica. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Dos hechos
así lo confirman. Primero, el fallido
intento del presidente de conformar una comisión de tecnócratas notables para
conducir un proceso de reforma de la SAT.
Y segundo, la oposición y suspicacia que despertó la terna para candidatos
a la vicepresidencia, tanto en su versión original como modificada a última
hora. Todas personas del régimen, que no
dan garantía alguna de poder cumplir una función fundamental en los meses por
venir. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">¿Por
qué digo función fundamental? Porque la ciudadanía comienza cada vez más a
construir en su imaginario una ruta crítica con básicamente dos
escenarios. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Por un
lado, está el escenario en que se preservan las reglas actuales del juego y se
designa un vicepresidente, para luego pedir la renuncia del presidente, e
inmediatamente después ir detrás de una reingeniería profunda al sistema
político e instituciones clave. Si tal
cosa se cumple, con la designación del vicepresidente de facto estamos ante la
elección de una persona que deberá asumir interinamente la conducción del
Ejecutivo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Por el
otro, está un escenario de cambio más radical e inmediato, que aprovecha el
momentum, exige directamente la renuncia del presidente, pero además la
suspensión de las elecciones, la conformación de un gobierno provisional
integrado por personas honorables, y la implementación de una reforma del
Estado. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Ambos
escenarios convergen en dos cosas: a) necesidad de reformas de fondo con mucho
diálogo social, b) actores con real capacidad de liderar la transición, y no
solamente llevar a término una administración colapsada en tanto llega la
siguiente. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Cualquiera
sea la ruta que finalmente adoptemos, dentro del grupo de reformas una agenda
mínima comienza a tomar forma. 1)
restructuración por la que debe pasar la SAT para evitar que más recursos
públicos sigan desviándose a través de redes de defraudación fiscal; 2) juicio
contra personas individuales y jurídicas que defraudaron al fisco; 3) cambios a
la ley de partidos políticos, para que transparenten las fuentes de
financiamiento, a la vez que se creen los mecanismos para una competencia más
equitativa entre diferentes organizaciones; 4) modificaciones al sistema de
elección de diputados para que, entre otras cosas, se ponga límite al número de
relecciones y se eliminen el mecanismo de elección por listados. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Probablemente,
una vez superada esta primera etapa de protesta y agenda mínima, el paso
inmediato deberá ser llamar a una asamblea nacional constituyente, que permita concluir
todo el proceso con una refundación del contrato social que los guatemaltecos
queremos para las siguientes décadas. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Así, el
cóctel para encauzar esta crisis se compone de tres ingredientes básicos: primero,
durante las semanas y meses por venir, mucha, muchísima movilización y protesta,
pacífica pero sostenida, combinada con un ejercicio de identificación de
liderazgos honorables; segundo, permanente auditoría social de las acciones de
los tres poderes del Estado, ejercida en redes sociales, plazas y foros, pero
también desde dentro de las instituciones, con el concurso de la burocracia que
apoya el cambio; y tercero, mucha capacidad de propuesta para impulsar aquellas
reformas que ya han sido identificadas como los principales cuellos de botella
para el saneamiento de nuestro sistema político. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">¡Eso
sí, hay que estar muy vigilantes y dispuestos a salir a la calle en cualquier
momento! </span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-60660809731951818192015-05-07T00:00:00.003-07:002015-05-07T08:54:06.239-07:00El tamaño del animal <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“(…) la
participación y presión ciudadana, amplia y plural, debe mantenerse para hacer
el contrapeso que las circunstancias exigen.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Aunque
se quiera, en estos días es muy difícil pensar fuera de la coyuntura por la que
atraviesa Guatemala.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Momento
verdaderamente histórico y decisivo para el futuro de nuestra democracia.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Desafortunada o afortunadamente nos llega entretejido
con un evento electoral, que </span>no genera mayor entusiasmo y solamente aumenta el ruido en el ambiente. Más bien es fuente adicional de preocupación.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;"></span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Hay años luz entre lo que sucedió en la plaza
de la Constitución el 25 de abril y el 3 de mayo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Noche y día.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Luz y sombra.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Convicción versus
acarreo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Legitimidad contra feria.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Dos caras tan distintas de esta misma moneda
llamada Guatemala.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">No se
pueden hacer escenarios, comentaba alguien hace poco.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Todo está cambiando rápidamente.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Cada día aparecen piezas de información que
necesariamente obligan a recalibrar y mantener la guardia alta.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Lo único cierto es que la presión ciudadana hay
que mantenerla para obligar a que esto llegue a un punto de no retorno.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ese en donde finalmente se abran opciones de
reforma real y sustantiva a un sistema político que ya no da para más.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En tal
contexto, el peso que hoy cae sobre la espalda de la sociedad civil es enorme.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Por una
parte es muy alto el riesgo de quedarnos entrampados en la crisis que ha detonado
la CICIG al destapar la mafia de “La Línea”, y concentrar toda la energía
social en movilizaciones exigiendo la renuncia de los mandatarios, ¡y solamente
eso!<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ojo, no hay que perder de vista
que, desde una perspectiva de más largo plazo, ellos dos, así como los muchos
otros que también tendrán que rendir cuentas, son solamente actores del momento.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Operadores de un sistema más complejo que
reproduce corrupción.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Luego,
además del precedente que es necesario establecer y por lo cual continuamos exigiendo
la renuncia de las más altas autoridades, en paralelo se debe hacer el trabajo
preparatorio que nos aliste para una discusión de fondo y reforma.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Evidentemente no contamos con los partidos
políticos, quienes han dado sobradas muestras de no tener capacidad técnica ni política,
mucho menos legitimidad para intermediar este diálogo social.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Pero la
cosa no termina allí, porque a eso hay que sumarle la dinámica del proceso
electoral que el domingo partió con concentraciones de diferentes partidos
tanto en la ciudad capital como en departamentos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y que seguramente intentará repetir vicios y
falencias de toda la vida: cascarón, bulla, tarima y pitos, pero nada más.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En dos platos, desgaste y despilfarro. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Sin
embargo, a diferencia del pasado, hoy la sociedad civil tiene la oportunidad de
construir una enorme sinergia sobre la base de la crisis actual, que obligue a
los candidatos a comprometerse con una agenda de reforma del Estado.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Aunque el argumento de una asamblea nacional
constituyente comienza a ganar tracción, el diablo, como siempre, estará en los
detalles.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>De allí que la participación y
presión ciudadana, amplia y plural, debe mantenerse para hacer el contrapeso
que las circunstancias exigen.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Tenemos
pues ante nuestros ojos la gestión de un triple proceso: sentar un precedente
que de una señal clara de intolerancia ciudadanía a la corrupción y abusos de
nuestra elite dirigente; crear las condiciones y participar en un diálogo
social que genere reformas a nuestro sistema político; y tratar de encauzar lo
más posible el evento electoral de septiembre próximo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¡De ese tamaño es el animal!<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-82185548454382326502015-04-29T22:09:00.002-07:002015-04-30T04:16:45.085-07:00Irregularidades regulares <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“La ausencia de
liderazgo ha sido patética.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Simple y
llanamente han quedado a merced y han sido devorados por toda esta energía
social que anda suelta.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Guatemala
es un país de irregularidades regulares.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Suceden cosas que son a ojos vista total y absolutamente irregulares,
pero llevan tanto tiempo sucediendo que terminan internalizándose, volviéndose regulares
y hasta predecibles.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Tres
ejemplos, así rapidito, solamente para ilustrar el punto:<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>1) desde la transición democrática de los
ochenta, esos comités electoreros, mal llamados partidos políticos, tiene una vida
útil que no va más allá de diez o quince años, con lo cual la intermediación
política es pobrísima en contenido además de intermitente; 2) proponga lo que
proponga (¡literalmente!), el candidato que termina en segundo lugar en una
elección se convierte en el siguiente presidente, casi como por derecho
adquirido; y 3) cada gobierno debe enfrentar al menos una crisis mayúscula,
para la cual obviamente no está preparado, y cuyo desenlace es igualmente
inesperado –por no decir de película–.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">El
escándalo de “La Línea” fue el mechazo que detonó la debacle patriota, quienes estaban
de un triunfalismo y arrogancia como no se veía en el Ejecutivo desde los
tiempos de la firma de la paz.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Por algo
dicen que no hay que hablar demasiado rápido, ni escupir al cielo, ni jurar que
de esta agua no beberé.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ahora, con la
cola entre las patas, nos les ha quedado otra que pedir paciencia y calma, y
hasta buscar iluminación divina.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Pero así
como son de predecibles y nefastas estas regularidades en nuestra vida política,
así también pareciera estar resurgiendo la dignidad perdida de nuestra clase
media, que ya se atreve a indignarse públicamente, asolearse, dar cacerolazos y
pedir el cambio.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Si algo nos quedó claro
a los guatemaltecos el sábado pasado es que, al igual que con las jornadas de aquel
mayo del 93, hay límites que los políticos no deben cruzar.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Las
fotos aéreas de la plaza de la Constitución son realmente conmovedoras.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Transmiten una fuerza ciudadana que muchos
creíamos en un coma profundo e infinito.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Ni se diga de la explosión geométrica que tuvo lugar en redes sociales
con análisis producidos casi en tiempo real, de mañana, tarde, noche y
madrugada, para alimentar así el argumentario de todos nosotros los
indignados.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Como
bien leí en una de las muchas frases que circularon: cuando el gobernante
pierde la vergüenza, el pueblo pierde el respeto.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>No cabe duda que eso es exactamente lo que ha
sucedido en este país.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El respeto se esfumó
y las figuras del actual presidente y vicepresidenta están muy devaluadas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La ausencia de liderazgo ha sido
patética.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Simple y llanamente han
quedado a merced y han sido devorados por toda esta energía social que anda
suelta.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">No es
para menos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Menudo favor nos han hecho
este par.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>No solamente conformaron un
equipo infestado de forajidos de quinta categoría, sino que además
contribuyeron al descarrilamiento de nuestra ya maltrecha democracia y
enclenques instituciones.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¡Aquí está tu
seguridad y tu empleo!, diríamos en buen chapín.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">¿Se
acuerda de aquella otra columna que escribí hace un mes titulada “¡Maldita
corrupción!”?<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Sí, esa en donde decía que
(sic) “además del daño que la corrupción ocasiona per se, el efecto de más
largo plazo es que impide el florecimiento de una saludable diversidad
política.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La sociedad deja de
interesarse por la coherencia de los planteamientos programáticos de sus elites
dirigentes y comienza a pedir lo básico: un mínimo de decencia.”<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Bueno, si entonces me hizo falta un ejemplo,
pues allí tiene este botoncito de muestra.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">¿Y
ahora qué? ¿qué hacemos después de la protesta? Esas son las preguntas que
están en el ambiente.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>No es cosa menor,
porque de la respuesta que demos derivarán consecuencias inmediatas pero
también de más largo plazo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Será el precedente
que indicará si como sociedad supimos o no aprovechar esta ventana de
oportunidad hasta hoy abierta, pero que ya hay quienes comienzan a tratar de
cerrarla, sigilosos, tras bambalinas, a empujoncitos suaves, con esa paciencia
cínica que los ha caracterizado siempre.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Están apostándole a que el clamor ciudadano será otra más de nuestras irregularidades
regulares.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Es hora
de romper con ese oráculo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Que no sea
solamente honradez lo que exijamos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Este
es el momento de protestar, pero también de proponer y mucho más aún de reformar.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-87272512473403238282015-04-16T02:28:00.001-07:002015-04-16T02:28:21.279-07:00Desde el graderío
<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“Los gobiernos
toman decisiones, equivocadas o acertadas, y las consecuencias más profundas y
duraderas no se hacen sentir sino años después.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Vamos a
suponer –por un momento solamente– que tenemos ante nosotros a un grupo de
ciudadanos que de buena fe quieren hacerse del voto popular para poder ser
servidores públicos en un país imaginario, gestionando nuestras múltiples
demandas sociales y procurando hacer un uso lo más eficiente y transparente
posible de los pocos recursos financieros, humanos e institucionales que todos ponemos
a su disposición.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Si al
supuesto anterior añadimos que el tiempo es escaso (¡sobre todo en política!), que
el grupo de personas dispuestas a tamaño sacrificio es insuficiente, y que la
cantidad de dinero que tienen es menor a la lista de necesidades de la sociedad
acumuladas a lo largo de los años, entonces tiene mucho sentido intentar
priorizar temas para concentrar energías.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>De eso se trata al final todo esto ¿no?, de gestionar escasez.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">La
pregunta del trillón de dólares pasa a ser entonces ¿cuáles debieran ser los
criterios para elegir este tema y no aquel otro, para asignarle más recursos a
la necesidad social “x” que a la necesidad social “y”?<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y la respuesta, como usted seguramente intuye
o ya lo ha pensado en más de una oportunidad, es simple y obvia: no hay.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Precisamente allí reside la razón de ser del
juego democrático, para tratar de convencernos que las prioridades identificadas
por el candidato tal son mucho más urgentes y de mayor impacto social que propone
el candidato cual.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Para
terminar de complejizar todavía más esta imaginación, es necesario decir
también que en la selección de prioridades sociales debe haber una altísima dosis
de convicción, y a veces hasta un poco de fe, de que se está haciendo la
elección correcta, pues los resultados que verdaderamente valen la pena, esos
que transforman la vida de las personas de manera sustantiva, no llegan de
inmediato.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Generalmente son procesos
largos que toman mucho tiempo. <o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Es así
como el ciudadano votante tiene ante sí una de las mayores debilidades del
sistema democrático: la paradoja de tener que elegir sin poder constatar los
resultados de su elección y poder premiar o castigar a su elegido en el momento
justo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Incentivo muy perverso pues
desincentiva la participación de los votantes tanto como la necesidad de buen
desempeño de los votados.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Los gobernantes
deciden y las consecuencias más profundas y duraderas no se hacen sentir sino
años después, cuando ya se largaron.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Luego,
si la corrección del rumbo no puede hacerse en tiempo real ni nada que se le
asemeje, ¿qué instrumentos nos quedan a los ciudadanos para hacer una elección
política y juzgar los méritos de un candidato versus otro, de un equipo versus
otro, de un enfoque de desarrollo versus otro?<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Básicamente dos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Primero,
la narrativa que logra articular cada uno de los contendientes, ese cuento donde
intentan convencernos que su visión de la sociedad y sus planes a futuro
recogen las necesidades más importantes de la sociedad, y las soluciones propuestas
son las que procuran el mayor bienestar para la mayoría.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Y
segundo, la solvencia moral y profesional de los colaboradores cercanos al
candidato.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Gestionar un gobierno es
tarea de muchas personas, y por lo mismo es fundamental entender quién llega a
cada puesto.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Así comienzan a gestarse
expectativas en la población, tanto en cuanto a capacidad técnica como honradez
y habilidad para constituir equipos de trabajo eficaces y eficientes.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Ahora
salgamos de ese imaginario y aterricemos en un país real y concreto, Guatemala,
por decir algo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Donde ni lo primero (narrativa)
ni lo segundo (equipos) aplica.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Porque en
algún momento decidimos como sociedad que ya no es necesario discutir ideas y
propuestas alternativas, sino más bien la tendencia es que todo más o menos se
parezca, por aquello de que el que se aleja mucho del hato corre el riesgo de
perderse y ser devorado.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y porque el uso
y costumbre de nuestra muy noble y muy leal cultura política chapina tiende a
ocultar los nombres de futuros empleados públicos hasta el último minuto.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">¿Y
entonces?, me dirá usted.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Entonces, le
diré yo, que es justamente allí en donde tenemos que seguir insistiendo desde el
graderío.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Para que los toros se pinten
tal y como son y nos permitan hacer una elección sin esa enorme catarata en el
ojo político del ciudadano común, votante medio, agente económico, como usted
quiera verse o llamarse.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>De ese
ejercicio depende mucho la perspectiva y futuro de nuestra democracia y
desarrollo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-5400227038186715912015-04-09T01:41:00.004-07:002015-04-09T01:45:13.024-07:00El laberinto <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“Los logros
sociales y el empoderamiento de una nueva clase media son dos condiciones que
posiblemente obliguen a un ajuste quizás más lento, pero a la larga más
sostenible e incluyente.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">El
último informe macroeconómico del BID se titula “El laberinto. ¿Cómo América
Latina y el Caribe puede navegar la economía global?”.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Una buena alerta, sin ser alarmista, sobre
las disyuntivas de política económica que los países de la región enfrentan en
los tiempos y condiciones actuales: con precios de materias primas a la baja,
un repunte de Europa que no llega nunca, una recuperación de la economía
estadounidense que solo recién comienza a dar señales alentadoras y unas
perspectivas de crecimiento regional muy por debajo de lo experimentado durante
los últimos años.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En ese
marco general me pareció muy acertado el esfuerzo analítico del banco en dos
sentidos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Primero, porque es un texto balanceado,
que mezcla tendencias regionales, subregionales y detalles individualizados de
cada economía. Así, la discusión y recomendaciones reconocen la realidad
diversa de nuestros países.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Por
consiguiente, la utilidad del texto aumenta.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Que Latinoamérica
va hacia un ajuste y consolidación fiscal parece inevitable.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero que dicho ajuste tomará formas muy
diversas también lo es.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Afortunadamente
los decálogos ya no nos aplican pues hay condiciones suficientes en cada país
para pensar y dialogar de manera creativa la gestión de nuestras
economías.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Así por
ejemplo, el reporte habla con mucha nitidez a países como Guatemala, que con
bajas cargas fiscales y bajos niveles de gasto público dicha consolidación sería
difícil de imaginar por la vía de reducir gastos solamente.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ello automáticamente nos coloca en una
discusión que evalúe otras opciones como buscar mayor eficiencia, transparencia
y progresividad en el uso de recursos públicos, temas todos que evidentemente
hemos descuidado durante los últimos años.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">La otra
dimensión que me parece destacable tiene que ver con esta visión más o menos
consensuada de que el tipo de ajuste que se de en la región será cualitativamente
distinto a la raja-tabla de otros tiempos, que comenzaba siempre a cortar por
el eslabón más débil: el social.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿Qué ha
cambiado? Seguramente el aumento en gasto social durante los últimos veinte
años ha generado suficiente inercia, que aunado a un crecimiento importante en
la clase media de muchos países han creado hoy un ambiente político distinto,
que obliga a ser más dialogantes en épocas de vacas flacas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La sociedad latinoamericana ha tomado mucha
conciencia y valoriza los logros sociales alcanzados, y difícilmente estaría dispuestas
a ponerlos en juego por la sola necesidad de cuadrar las cuentas fiscales.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Paulatina
y sanamente nos estamos moviendo hacia la búsqueda de opciones menos bruscas y
con más visión de largo plazo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Los
logros sociales y el empoderamiento de una nueva clase media son dos
condiciones que posiblemente obliguen a un ajuste quizás más lento, pero a la
larga más sostenible e incluyente.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Un
documento por demás pertinente en tiempo de elecciones, cuando comienzan a
recalentar los viejos motores simplistas y monotemáticos de política
económica.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ojalá y la evidencia que aportan
reportes de este tipo sea aprovechada para obligar a los liderazgos políticos a
tener un debate mucho más consciente y ajustado al momento actual del
país.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Como en otros países de la región,
Guatemala también debe apuntalarse en las voces de su clase media para forzar
un diálogo y gestión macroeconómica responsables y con mucha más visión de futuro.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Esa es la naturaleza de nuestro laberinto.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-54270639279116061052015-04-02T00:31:00.001-07:002015-04-02T00:34:34.882-07:00¡Maldita corrupción! <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“(…) que roben
pero que por lo menos hagan obra. ¿Obra? Sí, obra.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Que quiere decir asfalto, tubo, cemento y
block.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">La
diversidad de antecedentes determina la disparidad de expectativas. Por eso la
corrupción tiene una proyección distinta sobre la política en cada país.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Así tal cual lo puso Carlos Pagni en su
columna “El ABC de la corrupción”, haciendo una reflexión sobre los tres casos
de las mujeres presidentas latinoamericanas que están enfrentando de manera
simultánea escándalos por corrupción.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Por
supuesto, con el agravante que da haberse hecho del poder político con banderas
de izquierda, con lo cual la pena y castigo es doble.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Porque así es muchas veces la moral: doble.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Como si los negocios bajo la mesa fueran
exclusivos de tirios y no de troyanos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>No
debemos olvidar que la corrupción, como el tango, se baila de a dos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y no con esto se disculpa la falta, solamente
señalo el cacareo diferenciado.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En todo
caso, lo que no puede dejar de llamarnos la atención es ese enorme distractor
en que se convierte la corrupción.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Desviando
energías y recursos de aquello otro que en principio es mucho más sustantivo y
edificante para la sociedad: el juego y competencia de ideas y propuestas
alternativas para atender necesidades sociales.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>De eso va la democracia y a eso aspira el desarrollo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En
países más atrasados en términos de institucionalidad, organizaciones políticas
y propuestas conceptuales la cosa es todavía peor, pues la corrupción se
convierte en un freno doble.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Además del
daño que ocasiona per se, impide el florecimiento de una saludable diversidad
política.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La sociedad deja de
interesarse por la coherencia de los planteamientos programáticos de sus elites
dirigentes y comienza a pedir lo básico: un mínimo de decencia.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En
lugar de estar enfocados en temas sustantivos al desarrollo social, los
escándalos que nos regalan a diario las clases dirigentes hacen que las
demandas se vuelvan muy primarias: que roben pero que por lo menos hagan
obra. ¿Obra? Sí, obra.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Que quiere decir
asfalto, tubo, cemento y block.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Y así
es como la corrupción frena el progreso presente y futuro.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En países como Guatemala se nos pasan los
años con una democracia que se quedó enana, un Estado anoréxico que no encontró
la forma de dejar de serlo, partidos políticos que fueron vaciados de
contenido, y una sociedad civil con déficit de atención, limitaciones
discursivas e incapaz de resonar sus pocos mensajes para motorizar cambios.
Todo, o una muy buena parte, a causa de esta maldita corrupción que nos
carcome.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">El
clamor por lo esencial, por intentar detener –o cuando menos denunciar– el descaro,
paraliza todo lo demás: estrategias de desarrollo, claridad y consistencia en
la política económica, consolidación de un modelo de protección social,
cualificación y meritocracia en nuestra burocracia, reformas a la Constitución,
por decir algo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Por
supuesto, aunque en este río revuelto perdemos todos, como en la rebelión en la
granja de Orwell, unos pierden más que otros porque unos son más iguales que
otros.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Porque en Guatemala la espera es
un lujo que ya solo se pueden dar unos pocos.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Los mismos pocos de siempre.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Esos
a los que el impacto de un fallo de mercado o una ineficiencia gubernamental
les representa poco más que una molestia o costo marginal que siempre pueden
trasladar.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Mientras que para el resto
mayoritario, este descalabro que estamos viviendo supone limitar seriamente las
perspectivas de una vida plena.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Esto es
lo que volverá a estar en juego en cinco meses.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Y me temo que no con mucha perspectiva de cambio.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Al menos no dentro de las reglas actuales del
juego y de sus actuales jugadores.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Se
agotó el sistema, compatriotas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Démonos
cuenta que la pita ya no da para más. ¿Y ahora?<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Le
deseo un feliz descanso de Semana Santa.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-14094113482202861452015-03-26T01:06:00.003-07:002015-03-26T01:06:54.881-07:00El cartón de licenciado
<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“(…) siendo
Guatemala un país de jóvenes, la formación y gestión de nuestros talentos
debiera ser prioridad nacional.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Todos
los años por estas fechas las universidades americanas despachan cartas de
admisión y-o rechazo a los graduandos de secundaria. Un proceso que cada vez
más se ha convertido en una suerte de psicosis colectiva, mezcla de angustia y
frenesí que comparten tanto los jóvenes como sus padres.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Al
respecto, dos interesantes artículos aparecieron publicados recientemente.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Uno de Robert Reich, secretario del trabajo
durante la administración Clinton; y otro de Frank Bruni, autor de un libro
titulado “Where you go is not who you will be: an antidote to the college
admissions mania”.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Un fenómeno
muy propio de la sociedad norteamericana.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>En realidad de su clase media, que con los años ha idealizado la
educación superior como ese pase o garantía que le dará a los jóvenes una vida
próspera, feliz y bien remunerada.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero
que cada vez más deja de ser cierto pues los tiempos han cambiado, y las cosas ya
no son tan lineales como muchos creen o quisieran.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Para
comenzar, el costo de las universidades en dicho país puede llegar a tal
magnitud que obliga a padres a ahorrar con muchos años de anticipación, y-o a
jóvenes a tomar préstamos enormes para costear sus estudios.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Hay pues una inversión de recursos muy
importante, que se hace bajo el supuesto de que los retornos a ese grado
académico serán suficientemente altos para repagar deudas, reconstruir ahorros,
y además vivir mejor que la generación anterior.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Tenemos
individuos y hogares tomando decisiones de inversión en capital humano sobre la
base de información equivocada, incompleta, o que en el mejor de los casos ha
dejado de ser válida en el mundo actual.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Porque ya no es verdad que al final del túnel los está esperando un
empleo estable, decente y bien remunerado.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>De hecho, un estudio del Banco de la Reserva Federal de Nueva York señala
que 46% de los graduados de universidades se desempeñan en trabajos que no requieren
estudios superiores.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿Y entonces? <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Hasta
hoy son básicamente dos los supuestos que explican este comportamiento de hogares
con hijos en edad escolar.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Primero, la creencia
de que existe una relación lineal (ojalá exponencial) entre educación y
remuneración.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y segundo, la apuesta a
que, aún y cuando dicha relación no se cumpla para todo el mundo, para aquellos
afortunados que logren ingresar a universidades de cierto prestigio, las
conexiones que harán serán un activo tanto o más importante para la inserción
laboral futura.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">El
problema es que la ruta “más educación formal, mayor productividad, salarios
altos”, no sucede siempre; y la ruta “escuela prestigiosa, red de contactos, mejores
trabajos futuros”, no puede generalizarse a toda la sociedad porque depende de
la reputación de la escuela a la que el joven logra ingresar.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y como por definición la oferta de tales
escuelas es menor que la demanda, automáticamente se genera un proceso de exclusión
que inhibe el poder igualador de la educación al hacer más costosos los
procesos de búsqueda de empleo. <o:p></o:p></span></div>
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span><br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Esta
discusión que parece tan de primer mundo, con algunos ajustes es igualmente válida
para un país como Guatemala.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿Por qué? <o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Primero,
porque somos una sociedad con enormes desigualdades, y la educación superior es
una de las muchas formas en que hemos profundizado estas brechas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Segundo, porque siendo Guatemala un país de
jóvenes, la formación y gestión de nuestros talentos debiera ser prioridad
nacional.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Tercero, porque así como el
caso norteamericano está indicando que la formación superior ya no es panacea, con
mayor razón en Guatemala debiéramos pensar en una estrategia de generación de capital
humano que adopte diferentes formas, en vez de insistir en la receta única del cartón
de licenciado. <o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">No hay
que olvidar que América Latina comenzará a agotar su bono demográfico hacia el
2020.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y aunque Guatemala tendrá todavía entre
10 y 20 años más, bien que nos haría aprender de lo que están viviendo otras
sociedades más avanzadas y enfocarnos en una estrategia que invierta recursos en
educación de manera diferenciada.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-14222331849512710532015-03-19T02:44:00.004-07:002015-03-19T05:45:19.409-07:00Ladrándole al árbol equivocado <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“(…) empresas que
dependen de una fuerza laboral retribuida con salario mínimo no son
precisamente los motores que una economía que necesita para crecer, innovar y añadir
valor.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">La
propuesta del gobierno de tener salarios mínimos diferenciados ha provocado una
encendida discusión en varios círculos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Así
lo sugieren varias columnas de opinión, entrevistas a distintos actores, y comentarios
en redes sociales.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pocos temas son tan
repetitivos tanto en contenido como en falta de definición y acuerdo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y como dicen que tanto va al cántaro el agua
que quizás algún día se llene y rompa, pues aquí lanzo yo también mis cinco len
a esta conversación. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Para
comenzar, al escuchar los argumentos de unos y otros me parece que en vez de
uno estamos tratando de hablar de dos problemas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">El
primero tiene que ver con absorción de mano de obra.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es decir, hay más trabajadores ingresando a la fuerza laboral que número de empleos generados.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Un fenómeno que además se agudiza en países
con una estructura demográfica como la guatemalteca, donde aún estamos
disfrutando –en realidad malgastando– el bono demográfico.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El segundo problema tiene que ver con el nivel
que queremos dar a esa retribución mínima que la ley garantiza a cada
trabajador.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Y aunque
están relacionados absorción con nivel salarial, no son lo mismo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Por eso mezclar salario mínimo con creación
de empleo más que aclarar enreda.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En un
país como Guatemala, la baja creación de empleo se explica mucho más por cosas
como infraestructura inadecuada, institucionalidad débil, inseguridad, violencia,
baja calidad en la formación técnica y profesional de nuestra mano de obra, y
una limitada capacidad de nuestro empresariado para adoptar tecnologías; y mucho
menos por el nivel al cual se fija el salario mínimo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>De hecho, empresas que dependen de una fuerza
laboral retribuida con salario mínimo no son precisamente los motores que una
economía necesita para crecer, innovar y añadir valor a largo plazo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Luego decir que a menor salario mínimo se
generan más empleos es un argumento que no se sostiene mucho que digamos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Por
otra parte, el significado que tiene el salario mínimo no es solamente su valor
monetario.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El salario mínimo es también la
expresión concreta de un acuerdo al que la sociedad y sus actores económicos y
políticos llegan para decirnos “nadie debe emplear su tiempo y recibir un pago
inferior a x”.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Es un
piso mínimo, al igual que lo son muchos otros elementos que definen cualquier
contrato social, como por ejemplo los sistemas de educación y salud públicas, los
sistemas de pensiones y los sistemas de protección social.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es decir, el salario mínimo forma parte de
esa red de garantías sociales y económicas que los guatemaltecos estamos
dispuestos a darnos unos a otros.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Entonces,
¿por qué empecinarnos en bajar aún más el nivel y desmantelar nuestro ya débil contrato
social en vez de invertir capital político y económico en atender las
verdaderas barreras a la productividad, innovación y generación de empleo formal
que tanto necesita Guatemala?<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Al
final, ¿qué porcentaje de la población se emplea por un salario mínimo? No lo
sé, pero sí sé que más o menos tres cuartas partes de nuestra población se
emplea en la informalidad y menos de un 5% cuenta con algún tipo de estudios
universitarios.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Me atrevería a decir entonces
que nos estamos asustando con el petate del muerto, pues tampoco es el volumen
de trabajadores afectados por el nivel del salario mínimo lo que debe motorizar
esta discusión.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Ahora
bien, olvidémonos de todos estos argumentos y llevemos la propuesta al límite.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es decir, supongamos que a partir de mañana
cada municipio puede fijar su propio salario mínimo –porque me imagino que la
idea del gobierno no era dejarnos con una simple experiencia piloto, en donde
un pushito de municipios juegan con reglas distintas a las de todo el resto–.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ello implicaría que cada municipio tendría
que tener la capacidad de negociar y lograr acuerdos, lo cual sabemos que no es
así de sencillo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>No pasa ni siquiera a
nivel nacional, mucho menos en espacios locales en donde presumiblemente las
asimetrías entre actores y riesgos de captura del proceso serían todavía más agudas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Para
terminar, me parece que lo rescatable de todo esto es darnos cuenta que poco a
poco nos vamos orillando a tener que reabrir un diálogo nacional mucho más amplio
y complejo, que redefina las bases sobre las cuales queremos seguir viviendo en
sociedad.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El sistema político y muchas
de las instituciones económicas que de él derivan han dado ya muestras de total
agotamiento.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Pero mientras
ese momento llega, por ahora ¿no será que le estamos ladrando al árbol
equivocado? </span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-47106844730762325072015-03-12T00:54:00.002-07:002015-03-12T00:54:44.670-07:00Crónica de una pobreza anunciada
<i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“Estos son los
pobres crónicos de la región.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Personas
que nacieron, crecieron, se reprodujeron y murieron pobres.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Ahora
que están de moda los análisis y las especulaciones por el desacelere económico
en la región todo mundo recuerda las bondades de los años maravillosos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Esa primera década del siglo XXI en la que
América Latina tuvo un período de crecimiento económico robusto (2.5% anual en
promedio), reducción de pobreza como nunca antes se había visto (16 puntos
porcentuales cayó la pobreza general y 12 la pobreza extrema), mejoras
sustantivas en la distribución del ingreso (cinco por ciento de reducción en el
índice de Gini), y un aumento de la clase media (pasó del 23 al 34% de la
población de la región).<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y todo esto en
promedio.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es decir, hubo países que
tuvieron desempeños aún mejores.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Como es
normal, los análisis de mediano y largo plazo tienen que esperar un tiempo para
poder acumular evidencia y tratar de observar ese bosque que en la coyuntura se
nos pierde de vista por tener el árbol enfrente.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Hace un par de días los colegas del Banco
Mundial –Renos Vakis, Jamele Rigolini y Leonardo Luchetti– publicaron un
interesantísimo trabajo titulado “Los olvidados, pobreza crónica en América
Latina y el Caribe”.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span><br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Una
mirada creativa en su método y formas de estrujar los datos para tratar de identificar
a esos pobres que Rubén Katzman había bautizado ya desde 1989 como “pobres
crónicos”, para diferenciarlos de aquellos otros que enfrentaban tal condición
de manera transitoria o inercial.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Hoy,
con métodos cuantitativos más sofisticados, el tema vuelve a estar sobre el
tapete, y nos da un jalón de orejas muy fuerte a los guatemaltecos, que
claramente tenemos una papa hirviendo en las manos.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;"><o:p> </o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">El
mensaje principal del documento es brutal: uno de cada cinco latinoamericanos o
alrededor de 130 millones de personas no han conocido nada distinto a la
pobreza, subsistiendo con menos de US$4 al día a lo largo de sus vidas. Estos
son los pobres crónicos de la región.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Personas
que nacieron, crecieron, se reprodujeron y murieron pobres.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Una población que ni de oídas supo de las
mieles del crecimiento económico y tampoco les llegó la ambulancia de la
protección social.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En un
extremo del espectro está Uruguay con menos del 10%<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de pobreza crónica, y en el otro está Guatemala
con la tasa más alta de toda Latinoamérica (¡50%!).<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En otras palabras, la mitad de nuestra población
pobre no ha podido mejorar su condición durante una década de bonanza; y, como
en la muerte de Santiago Nasar a manos de los gemelos Vicario: nadie dijo, ni dice,
ni hizo, ni hace nada.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Pero
además, este nuevo análisis de la pobreza crónica en la región nos revela que
ya es un fenómeno que afecta tanto al medio urbano como rural.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>De hecho, en algunos países –Chile, Brasil,
México, Colombia y República Dominicana– el número de pobres crónicos urbanos
es mayor que el de pobres crónicos rurales.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>No es el caso de Guatemala, pues seguimos siendo de los países más
rurales en un continente que es mayoritariamente urbano.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Y por si
no fuera ya suficiente, el estudio confirma una vez más eso que tanto hemos
dicho y repetido por años: el crecimiento económico no ha bastado para sacar a
los pobres crónicos de la pobreza, ya que (sic) “los países con las tasas más
altas de pobreza crónica fueron los que menos crecieron.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Por ejemplo, Guatemala creció menos del 1% al
año y aproximadamente el 50% de la población inicialmente pobre permaneció en
la pobreza en el 2012.”<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Con tanta
y tan contundente evidencia uno esperaría que buena parte del debate nacional
estuviera enfocado hacia la manera de revertir estos números nefastos, que no
son otra cosa que la crónica de una pobreza anunciada.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero de nuevo, nadie dijo, ni dice, ni hizo,
ni hace absolutamente nada. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8165517409415480113.post-43539324965548811212015-03-04T23:44:00.000-08:002015-03-04T23:46:41.919-08:00¿Cambios de fondo en el Fondo? <i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">“(…) encontrar
puentes que conecten el discurso macroeconómico de estabilidad y crecimiento
con una agenda microeconómica de un bienestar que necesita distribuirse de manera
más amplia.”<o:p></o:p></span></i><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En
septiembre de 2013 el Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó un documento
titulado “Women, work, and the economy: macroeconomic gains from gender
equity”.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y el mes pasado han vuelto
sobre el tema con otro artículo titulado “Fair play: more equal laws boost
female labor participation”.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Esa
institución que en el pasado se construyó una fama de policía macroeconómico
del mundo en desarrollo, con sus temidas misiones y recomendaciones de política,
planes de ajuste estructural y férreas condicionalidades para que los países
más atrasados pudieran acceder a financiamiento, de repente como que da una
vuelta de gato y comienza a reflexionar sobre temas fuera de su libreto.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>No es la primera vez que nos sorprenden,
gratamente debo decir, con publicaciones que le hablan de manera más directa a
un público no tradicional.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Recordemos
aquel otro artículo aparecido hace un año, sobre los efectos de la desigualdad
sobre el crecimiento económico, que levantó tanto polvo porque puso sobre el mismo
tapete el tamaño del pastel y la manera de cortarlo y repartirlo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Pero
volviendo a los dos artículos sobre género, la revisión de literatura que el
FMI ha hecho en estos documentos es muy sugerente en términos de los efectos
económicos de la exclusión y desigualdad en la participación de la mujeres en
los mercados laborales.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Basten algunos datos
para poner en contexto el tema.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Así, la
evidencia nos dice que las mujeres representan hoy por hoy más de la mitad de
la población mundial, el 40% de la fuerza laboral del planeta, la mayoría del
trabajo no remunerado en el mundo. Además dedican dos veces más tiempo que los
hombres a las tareas domésticas y cuatro veces más tiempo al cuidado de los
niños.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En el trabajo a tiempo parcial y
autoempleo están sobre representadas, generalmente ganan menos que los hombres,
están sub-representadas en cargos de elección popular así como en posiciones de
alta gerencia en grandes corporaciones.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Están
sobre representadas en la economía informal así como entre la población pobre,
y su tasa de participación en los merados laborales alcanza solamente el 50%.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En Centro América las mujeres participan 35%
menos que los hombres en el mercado laboral –en la OECD este indicador es del
12%–, y en Guatemala ganan entre un 30 y 40 por ciento menos aunque tengan las
mismas calificaciones.<span style="mso-spacerun: yes;"> L</span>as pérdidas atribuibles a esta brecha de género en los mercados laborales puede
alcanzar hasta 27 puntos del producto interno bruto en ciertas regiones.<o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">Con ese
diagnóstico, es evidente que la asignación de nuestro recurso humano es
subóptimo.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y por tanto, hay un papel
para políticas públicas mucho más agresivas en materia de inclusión y género.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Concretamente la política fiscal, pero sobre
todo la política social, tienen mucho espacio para tratar de corregir tal
situación.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es allí que debe darse la
batalla para una mayor equidad al momento de diseñar esquemas de pre y post
natal, sistemas de educación prescolar, y esquemas de cuidados infantiles que
permitan a ambos padres integrarse a la fuerza laboral.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero también se puede incidir en el diseño de
políticas de fomento productivo que procuren a mujeres un mayor acceso a
financiamiento, insumos productivos y tecnología.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">En un
plano más estratégico, me pregunto si la llegada de Christine Lagarde tiene
algo que ver con este brote analítico del FMI.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Quién sabe.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Lo interesante y
positivo es que poco a poco estas instituciones globales, otrora tan criticadas
por su lejanía con el ciudadano promedio, hacen un esfuerzo por encontrar puentes
que conecten el discurso macroeconómico de estabilidad y crecimiento con una
agenda microeconómica de un bienestar que necesita distribuirse de manera más
amplia.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;">De
seguir en esa senda seguramente irán recuperando terreno, credibilidad y
legitimidad ante una sociedad civil que también está evolucionando, que se
mantiene informada y alerta de lo que sucede en el mundo entero.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Una sociedad mundial que agradece y utiliza estos
pequeños bienes públicos que se generan desde los centros del poder político porque
abren espacios para debatir problemas muy concretos y fundamentales como la
inclusión.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
Tomas Rosadahttp://www.blogger.com/profile/13331253653496028288noreply@blogger.com0